Brecha digital de género: Superando la desigualdad en el mundo digital

En la era de la información y la tecnología, existe una realidad: las mujeres enfrentan barreras específicas en su acceso a la tecnología, lo que se transforma en una evidente desigualdad en cuanto a oportunidades de acceso a la tecnología en comparación con los hombres.

La brecha digital es un concepto que hace referencia a la disparidad que existe entre personas que tienen opciones de uso y acceso a la tecnología, frente a aquellas otras que, principalmente por su condición de género o por su edad, no la tienen. Si en un post anterior hablamos de la existencia de la brecha digital en adultos mayores, en este artículo queremos hablar sobre qué es la brecha digital de género: los factores que contribuyen a su existencia, el impacto de la brecha digital de género en la sociedad, así como las estrategias para cerrarla y los desafíos y oportunidades que ello conlleva.

¿Qué es la brecha digital de género en España?

En España, la brecha informática de género también es una realidad. A pesar del alto nivel de conectividad en nuestro país, las mujeres todavía enfrentan dificultades para acceder a las TIC en igualdad de condiciones que los hombres. Según el informe Brecha digital de género 2023, el 92,8% de las mujeres españolas de 16 a 74 años usa Internet al menos una vez a la semana, apenas dos décimas por debajo de los hombres.

Esta cifra, aparentemente poco llamativa, se acentúa en áreas rurales y entre mujeres mayores, quienes pueden tener menos familiaridad con la tecnología y enfrentar desafíos para aprender a usarla: por encima de los 75 años de edad, hay más hombres usuarios de Internet (44,6%) que mujeres (39,7%). Además, la todavía disparidad de género en campos técnico y científicos, contribuye a perpetuar la brecha de género STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).

Factores que contribuyen a la brecha digital de género

Existen distintos factores que contribuyen a la brecha digital de género: desde un acceso más bajo a dispositivos como ordenadores, smartphones y acceso a internet, hasta una formación menor o menos habilidades necesarias para aprovechar plenamente las oportunidades de las TIC.

A grandes rasgos, la brecha digital de género en la mujer y las nuevas tecnologías sucede por:

• Falta de recursos económicos.
• Restricciones culturales y sociales.
• Estereotipos de género arraigados.
• Menos mujeres mayores trabajando, en comparación con los hombres de su misma edad.
• Menos representación en el campo de la tecnología y la informática.

Todos estos motivos contribuyen a la brecha digital de género y, en definitiva, a la inferioridad de oportunidades que tiene la mujer respecto al hombre en el conocimiento de las TIC, en el acceso a la información y en el uso de las tecnologías y la comunicación digital.

Además, y según la UNESCO, factores como la zona geográfica, los recursos económicos, el sexo, la edad, la educación o la lengua son determinantes, y se convierten en aspectos que influyen directamente en la brecha digital de género.

El impacto de la brecha digital de género

Ahora que ya conocemos los factores que hacen que exista la brecha TIC de género en España, es importante saber las consecuencias de la brecha digital de género. Y es que el hecho que las mujeres tengan menos acceso a la tecnología y a las herramientas digitales en comparación con los hombres, provoca:

• Una limitación del acceso al conocimiento: las mujeres con acceso limitado a la tecnología tienen menos acceso a la información y, por lo tanto, pueden estar menos conectadas a la sociedad. Además, esto también influye a optar a menos oportunidades educativas.
• Barrera en el desarrollo profesional: las TIC son, a día de hoy, recursos y herramientas necesarias para el mundo laboral. Por lo que las mujeres que no tienen habilidades TIC o menos habilidades digitales, tienen menos oportunidad de conseguir un buen empleo y de desarrollarse profesionalmente.
• Participación ciudadana y política: al igual que sucede con la brecha digital en personas mayores, la brecha digital por género provoca que, las mujeres con menos opción a optar a la tecnología, tengan menos participación ciudadana y puedan alzar menos la voz.
• Empoderamiento económico: la igualdad de oportunidades digitales entre hombres y mujeres contribuiría a permitir que las mujeres pudieran utilizar la tecnología de manera efectiva, generando un impacto positivo en el desarrollo socioeconómico de la sociedad.

Estrategias para cerrar la brecha digital de género

Cerrar la brecha digital de género en España requiere de una serie de estrategias integrales que fomenten la inclusión y participación activa de las mujeres en las STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) y las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación).

Una de las vías fundamentales es poder estudiar una FP Informática de Grado Medio, lo que permite obtener habilidades técnicas y conocimientos especializados para acceder a un mercado laboral con alta demanda de perfiles informáticos. Al garantizar una representación más equitativa en estos campos, se reduce la brecha digital de género.

Además de ello, la creación de programas y ayudas para mujeres en la tecnología también contribuye al cierre de esta brecha de género digital. Apoyar y empoderar a las mujeres que se especializan en el ámbito tecnológico es fundamental.

Finalmente, otra estrategia para cerrar la brecha digital de género es trabajar en el cambio de percepciones culturales y estereotipos de género arraigados. Educar en una sociedad digital inclusiva se traduce en eliminar la brecha digital de género en España.