La composición y montaje de un escaparate

La elección de un buen escaparate determinará si los consumidores entran o no en el punto de venta.El escaparate debe inspirar, insinuar, evocar, en definitiva, sugerir.

Un escaparate es un espacio físico delimitado normalmente por cristal, que muestra los productos y/o servicios que se pueden encontrar dentro del establecimiento.

De la elección de un buen escaparate dependerá que los consumidores entremos o no en el punto de venta.

El escaparate debe proyectar la imagen del interior del punto de venta y ser “el primer y mejor comunicador” de los artículos que se venden en el local.

De entre todas las cualidades que debe reunir un escaparate, que a continuación a través de un ejemplo desarrollaremos brevemente, todas ellas pretenden alcanzar una meta. Atraer la atención del consumidor.

Louis Vuitton, empresa francesa fundada en 1854 y especializada en marroquinería, artículos de viaje y complementos de lujo que posee más de 400 tiendas en más de 60 países.

El escaparate de Louis Vuitton fue galardonado hace un par de años en los Premios Top 10 a los mejores escaparates por Turismo de Barcelona. Está situado en el número 80 de la importantísima vía Paseo de Gracia en Barcelona.

En cuanto a la visibilidad, cumple con los requisitos para ser apreciada, el tamaño de la acera donde está situada la tienda y la recepción de luz natural hace que se pueda disfrutar de una buena visión de conjunto. Además, el tamaño del escaparate guarda una relación de proporcionalidad con la tienda.

Cuando hablamos de coherencia, nos referimos a que el escaparate no puede contraponerse ni en espacio, ni el materiales, ni en calidad, ni en diseño a lo que la tienda va a mostrar en su interior.

La colocación de los artículos Louis Vuitton siguen la armonía de los elementos que se exhiben en el escaparate.

La unidad persigue armonía y equilibrio. No pueden haber mezclas de artículos de famílias, usos, procedencias y cualidades distintas en un mismo espacio. Por lo tanto, no se mezclarán bolsos, con maletas ni con zapatos ni con accesorios de viaje.

Cuando un establecimiento muestra a través de su escaparate un alto grado de organización, transmite al cliente una imagen de seriedad, eficiencia y un buen servicio.

La forma, el quilibrio, el espacio, la luz, la orientación… forman parte de una correcta composición del escaparate.

La oportunidad va ligada al calendario de programación del escaparate, es decir, el escaparate reflejará cualquier festividad o estación señalada, así como aprovechará cualquier imprevisto para crear una oportunidad de negocio.

Cuando existe una aceptación no razonada significa que el consumidor está sugestionado. Por ello el escaparate debe inspirar, insinuar, evocar, en definitiva, sugerir para que el viandante crea que tiene una necesidad al ver el escaparate y la compra del producto satisfará esa necesidad.